miércoles, 9 de octubre de 2013

Tema 5. Carlos I: Política interior y exterior.

Hola, aquí os dejo el resumen de TEMA 5 de historia.
En total son 2 hojas de documento de word, o sea que tiene directamente la extensión que tendrías para escribir en el examen de la PAU.


Aquí dejo el link con la descarga directa del documento en "Mega".Aquí abajo dejo el resumen por si quieres echarle un vistazo antes de descargarlo.


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TEMA 5. CARLOS I: POLÍTICA INTERIOR Y EXTERIOR

Tras morir Fernando II de Aragón en 1516, Carlos de Gante, hijo de Felipe el Hermoso y Juana I de Castilla, asumió los dominios paternos (Países Bajos, el Franco Condado, el sur de la actual Alemana, Austria y Tirol, y por tanto los derechos al título de emperador del Sacro imperio Germánico, bajo el nombre de Carlos V) y los maternos (las coronas de Castilla, Aragón y Navarra, el sur de Italia y las Indias), esto es, un conjunto de estados heterogéneos con lenguas, culturas e instituciones diferentes. Carlos I de España y V del Sacro Imperio Romano Germánico se casó con su prima Isabel de Portugal en 1526.

Comunidades y Germanías.
En las primeras reuniones de las Cortes, Carlos I tuvo que enfrentarse a una férrea oposición debido a su menosprecio de las leyes castellanas y a la arrogancia de sus consejeros (que veían en los dominios hispanos una fuente de aprovisionamiento). Paralelamente a su elección como emperador alemán en 1519, la oposición se convirtió en una verdadera revuelta que se manifestó en Castilla, Valencia y Mallorca.

-La revuelta de las Comunidades (1520-1522) tuvo lugar en varias ciudades castellanas, especialmente en Toledo, Segovia y Salamanca. Estuvo protagonizada por gente de la ciudades, que autoproclamaron una comunidad opuesta a la política de Carlos I. Estas rebeliones nacionalistas reclamaban: la supresión de los consejeros extranjeros; la reducción de los impuestos y la prohibición de la salida de oro, plata y lana (en defensa del patrimonio de la corona); una mayor participación de la comunidad en el gobierno del reino a través de los procuradores (representantes de las ciudades en las Cortes); y la disminución del poder real y de la nobleza. La derrota de los comuneros en Villalar (1521) y la ejecución de sus principales cabecillas (Bravo, Padilla y Maldonado) supuso el final del movimiento y el comienzo de una durísima represión. En este contexto, Enrique II de Navarra, apoyado por el rey francés Francisco I y por una parte de la población, recuperó el reino. Sin embargo, perdió la Alta Navarra ante Carlos I tras la cruenta batalla de Noáin.

-La revuelta de las Germanías (1519-1523) acaecida en la Corona de Aragón (Valencia y Mallorca) contó con la participación de artesanos, campesinos, trabajadores y miembros del bajo clero. Estos grupos mostraron su descontento ante una epidemia de peste y a la respectiva ausencia del rey (que había dejado a sus representantes en España mientras él estaba en Alemania). Reivindicaban el dominio de los municipios para los gremios y la abolición de la jurisdicción señorial y los feudos. Finalmente la rebelión también fue duramente reprimida por las tropas reales y nobiliarias.

La política exterior del Emperador respondió a tres proyectos: el deseo de unificar el cristianismo, la defensa de su herencia dinástica (frente a Francia, al Imperio Otomano y a los príncipes alemanes) y del Mediterráneo occidental. Todo esto requirió de grandes cantidades de oro y plata de las Indias para su financiación y del apoyo de una eficaz red de embajadores, además de un poderoso ejército (organizado en tercios).
Francisco I de Francia llevó a cabo numerosas guerras contra Carlos I debido a sus anhelos expansionistas, siendo frecuentes los choques en Navarra, los Pirineos, Países Bajos, Franco Condado e Italia.
Carlos I apoyado únicamente en Gran Bretaña tuvo que hacerle frente a una coalición de los franceses junto con los otomanos y los príncipes protestantes alemanes.

Las consecuencias de la guerra contra Francia fueron:
1.      Las conquistas territoriales en Italia (Milán y los presidios de Toscana) y el control sobre Génova y el Papado. En el tratado de Cateau-Cambresis (1559) firmado por Felipe II (hijo de Carlos I) y Enrique II (hijo de Francisco I) se estableció la definitiva hegemonía hispana en el Mediterráneo.
2.      El aumento del prestigio militar gracias a sucesos como el Sacco di Roma (victoria de las tropas imperiales frente al Papado, que no aceptaba la prepotente presencia española en Italia, y Francia) y la Batalla de San Quintín (contra los franceses en 1557 con Felipe II como rey).
3.      La ruina financiera a causa del pago de todas estas batallas, en la que se vio inmerso Felipe II.

La lucha contra el Imperio Turco.
El expansionismo turco cobró un gran impulso a principios del siglo XVI, sobre todo, durante el reinado de Solimán II “El Magnífico”, que supuso una grave amenaza tanto en el Valle del Danubio (apoderándose de Hungría, Belgrado y llegando a sitiar Viena) como en el Mediterráneo (tomó la isla de Rodas).
El sultán se alió con los corsarios berberiscos Barbarroja y Dragut. Juntos realizaron numerosas incursiones desde Argel a España, Italia y las islas mediterráneas. Carlos I, que carecía de una flota con la que hacerles frente, obtuvo una victoria en Túnez (1535) pero fue derrotado algunos años más tarde en Argel (1541).

Por último, el emperador tuvo que enfrentarse a la difusión del protestantismo iniciado por el monje y teólogo Martín Lutero en el norte de Europa y que recibió el apoyo de los príncipes alemanes (que veían en el desmantelamiento de la Iglesia católica un medio por el que aumentar sus posesiones y rentas además de independizarse de su emperador). Carlos I, intentando conciliarse con el Papado, quiso establecer un compromiso entre ambas ideologías en el Concilio de Trento (1545-1563). Los príncipes alemanes no asistieron y tras el impulso de la Contrarreforma se selló la ruptura total con los protestantes, que formaron la Liga de Esmalcada. Carlos I los derrotó en Mühlberg, Alemania (1547).


No obstante, en plena bancarrota económica, Carlos V legó el patrimonio austriaco y el título de emperador  a su hermano Fernando, tras haber firmado con los protestantes la Paz de Augsburgo (1555). Un año más tarde Carlos I renunció también a los reinos españoles y a los dominios italianos, así como a los Países Bajos y al Franco Condado, esta vez en su hijo Felipe. Finalmente se retiró al monasterio de Yuste (Extremadura), dónde murió en el año 1558.

4 comentarios:

  1. hola, donde esta la ubicación de eso?

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    1. Buenas tardes. Desgraciadamente, Mega eliminó todos los archivos por "falta de actividad". Cuando intenté recuperarlos, vi que ya no estaban en ningún lugar. Lo único que ha permanecido es lo que hay escrito aquí en el blog, pero es exactamente lo mismo que los documentos, solo tendrías que copiar y pegarlo tú en tu propio documento si quieres imprimirlo.
      Siento las molestias 😩

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    2. No le di a publicar como autora, pero te he respondido yo.

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